‘Somos una colonia disfrazada de comunidad autónoma. Ustedes, los que hoy se reúnen en un innecesario e hipócrita Consejo de Ministros en una isla a su vez inadecuada para ello, nos han disfrazado de colonia para perpetuar una dominación sobre esta tierra que iniciaron hace seis siglos. Pero este vil engaño y opresión no se los toleran ya a España ni Canarias ni el resto del mundo, porque estas Islas no forman parte de la nación española; este Archipiélago está en otro continente. Es decir, somos una colonia descaradísima. Por eso queremos nuestra libertad. Queremos ser una nación libre y, una vez conseguido este objetivo, mantener las mejores relaciones diplomáticas, políticas, comerciales y culturales con España. Compartimos la misma lengua. Nuestra bandera canaria ondeará junto a la española en todas las situaciones posibles, pero en las Islas ninguna enseña estará por encima de la bandera de las siete estrellas verdes. El deseo y el derecho del pueblo canario a ser libre, además de histórico, es justo y legítimo. No tiene vuelta atrás. Señores del Consejo de Ministros, ¿y de los derechos de Marruecos sobre Canarias y sobre sus aguas, qué? El ansia de los canarios a ser libres, a ser una nación con su Estado es inaplazable e irreprimible‘.

Y es que ustedes erre que erre, siempre igual, con sus proclamas paranoicas-independentistas sin apoyo popular ni argumentos creíbles. Claro que la casta política que nos ha caído que permite a cualquier demente  quemar nuestra bandera nacional, pitar nuestro himno y amenazar nuestra libertad, sin solventar el problema, pues también tiene culpa de la situación. En fin..